El Futuro del Modelo de Desarrollo Europeo

EL GRUPO DE LOS 30 Y LA DESTRUCCIÓN CREATIVA
AUDIO: https://youtu.be/_dGy1xpag-s
TEXTO (PDF): https://yadi.sk/i/EpabmF8rd7CPRw
1.
El reciente informe
“Reviviendo
y Reestructurando el Sector Empresarial Post-Covid. DISEÑO DE INTERVENCIONES DE
LAS POLITICAS PUBLICAS” ha sido elaborado, bajo la dirección del anterior
presidente del Banco Central Europeo Mario Draghi, por el denominado “Grupo de los 30”. Este
informe tiene particular interés desde la perspectiva de la apuesta de la élite
financiera por una estrategia de “destrucción creativa”.
2.
El “Grupo de los 30” es un organismo consultivo
compuesto por personalidades de primer nivel del sector bancario privado y de
los bancos centrales. Fue constituido en 1978 y financiado por la Fundación Rockefeller.
3.
El informe
contiene un interesante despliegue de criterios a seguir por los gobiernos ante
la crisis actual desde la perspectiva de la política industrial y empresarial,
incluyendo qué empresas deben dejarse caer y a cuáles debe ayudarse y cómo.
4.
El informe
menciona 6 veces la expresión “destrucción creativa”, confirmando así de forma
expresa el interés central de la élite financiera por impulsar esta estrategia.
Como se indica en la página 9 del informe, “La
intervención de los gobiernos debe centrarse en los fallos del mercado y en
gestionar el ritmo de la necesaria destrucción creativa”. Como se dijo en
la propia presentación del informe: “El
informe insta a los gobiernos a alejarse de las ayudas generalizadas y a
adoptar medidas más específicas, permitiendo la reasignación de recursos
necesaria para que las economías salgan de la crisis más eficientes y más fuertes”.
5.
El informe
nos reafirma en la impresión de que la “destrucción creativa” va a convertirse
en la estrategia clave de las políticas económicas occidentales durante los próximos
años. Recordemos que esto tiene dos vertientes. Una aparentemente lógica, que
facilita que las fuerzas del mercado lleven a la sustitución de empresas con
problemas por otras más eficientes. Y otra, lamentablemente habitual, de
sustitución de empresas pequeñas o débiles (eficientes o no) por quienes
dominan el mercado, controlan a los responsables políticos o disponen de
recursos monetarios gracias a las políticas expansivas de los bancos centrales.
6.
Es significativo
y preocupante que, ante la pregunta clave de “¿Cómo debería determinarse la
viabilidad y necesidades de firmas concretas y por quién?” el informe plantea
como primera vía de análisis “¿Quién tiene el dinero?”. Este planteamiento, lógicamente,
nos lleva a dejar en manos de las grandes corporaciones una responsabilidad
que, para gestionarse de forma neutral y objetiva, parece que debería quedar en
manos de los responsables públicos. Recordemos que “tener dinero” no significa
ser más eficiente. Especialmente en el caso de los grandes bancos, a pesar de
su difícil situación, y los grandes fondos de inversión, disponen de casi inagotables
recursos financieros permanentemente aportados a los mismos por los bancos
centrales.