EKAI Journal. MIGRACION Y AYUDAS SOCIALES



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"6.      En conjunto, por lo tanto, los criterios a seguir en el debate sobre las ayudas sociales percibidas por los migrantes deberían ser, en nuestra opinión, los siguientes:
A.     Delimitar de forma estricta los supuestos de fraude, identificarlos y corregirlos.
B.     Evitar cuestionamientos generales que, en último término, sólo llevan a poner en cuestión en términos generales las ayudas sociales de todo tipo.
C.     Identificar con claridad los intereses empresariales existentes en unas u otras ayudas sociales y corregirlos enfocando el debate hacia el ataque al afán de lucro desorbitado de los empresarios que se benefician de ello mediante la disposición masiva de mano de obra artificialmente barata".



















"6.      De esta forma, la ciudadanía ha ido acumulando una creciente frustración frente a las expectativas reales de cambio, ante una dinámica de sucesión entre izquierda-derecha que, a largo plazo, apenas cambiaba nada. O incluso, si nos referimos al período (neo)liberal, el resultado final era cada vez más negativo para los asalariados.
7.      Con frecuencia, estas políticas sociales planteadas en los programas electorales han sido incluso corregidas por los propios partidos socialdemócratas en el poder, una vez transcurridos 2/4 años desde el acceso al gobierno. Todo ello ha ido desgastando progresivamente la credibilidad de los proyectos socialdemócratas".













"5.      
Abandonar las actuales políticas migratorias debe compaginarse con la libertad de movimientos y el respeto a los derechos humanos de migrantes y refugiados. Para gestionar todo ello de forma eficiente y flexible, como ya ha planteado el Banco Mundial, los instrumentos fiscales resultan preferibles a las cuotas migratorias. En particular, el establecimiento de un impuesto a la contratación de trabajadores extranjeros cuyos tipos se gestionen al alza y a la baja en función de la evolución real de las migraciones y de los objetivos de las políticas migratorias".













"7.      El globalismo está ya en crisis desde hace aproximadamente una década. Su cuestionamiento está ligado al cuestionamiento del poder de la élite financiera que ha venido controlando Europa y Estados Unidos y, a través de este último país, el mundo. El cuestionamiento se inició a través de los países emergentes –China y Rusia- y el creciente peso político, económico y militar de los mismos. Continuó con el creciente desplazamiento de la hegemonía norteamericana en Asia y Africa. Y está crecientemente amenazado por la inestabilidad política de Europa y Estados Unidos. Todo hace prever que la élite corporativa occidental pierda su poder político en un plazo de 10 años. Con ella, caerá el globalismo como ideología dominante en Occidente y, a la vez, se frenará y racionalizará el bárbaro proceso migratorio que está destruyendo los países de origen y de destino de los migrantes sólo para alimentar el lucro y el afán de dominación de la oligarquía financiera occidental". 


"10.      Si, en un primer momento, tienden a ser los “malos empresarios” quienes recurren rápidamente a reducir costes a través de la contratación de esta mano de obra barata, la dinámica del mercado acaba arrastrando al conjunto de la economía. Los empresarios son cada vez más reticentes a la inversión tecnológica y cada vez más entusiastas con la inversión en actividades de bajo valor añadido". 
"2.      La gigantesca campaña de 2015 a favor de “acoger al millón de refugiados” supuestamente provenientes de Siria por motivos de solidaridad (“Ongi Etorri Errefuxiatuak” en el País Vasco) queda así ahora retratada como lo que realmente era: una despreciable campaña de la élite corporativa alemana para hacerse con mano de obra barata, y exactamente en la cifra “demandada” a Merkel por la patronal alemana: 1.000.000".




1.            “Todos sabíamos que la inmigración masiva acabaría en desastre”. Lo publicó en un artículo la periodista sueca Lena Mellin, conocida colaboradora del diario socialdemócrata “Aftonbladet” y tradicionalmente entusiasta defensora de las políticas pro-inmigración.

Más aún, Lena Mellin llega a titular su artículo: “Los líderes de los partidos deberían estar avergonzados de sí mismos”.


“2.         La falta total de argumentos que justifiquen los actuales procesos migratorios a los países industriales se evidencia aún más rápidamente en la medida en que asumimos el análisis desde una perspectiva socialdemócrata. Esto es, desde la perspectiva de los intereses de la gran mayoría de la población, constituida por los trabajadores asalariados. Es a partir de ese momento cuando se identifican con claridad las diferencias entre los intereses generales y los intereses empresariales y, como consecuencia de ello, desaparecen casi de inmediato los últimos soportes argumentales a favor de estos procesos”.



“1.          El impacto negativo de la migracion sobre el Modelo de Desarrollo tiene una solucion sorprendentemente sencilla: el establecimiento de una carga impositiva especifica para la contratacion de trabajadores de otros países.

Se trata de una via que permite a la vez hacer frente a la inmigracion masiva y asegurar el pleno respeto de los derechos humanos de migrantes y refugiados”.


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